En los últimos días, se reportaron tres incendios o explosiones en sistemas de almacenamiento de energía en Estados Unidos, Alemania y Reino Unido, lo que ha renovado la atención sobre las preocupaciones de seguridad en el sector.
El 18 de febrero, ocurrió un incendio en la instalación de almacenamiento de energía de Moss Landing en EE. UU., marcando su cuarto incidente. El incendio duró más de ocho horas, dañando más del 70% del equipo. El incendio ocurrió en el mismo lugar que un incendio similar un mes antes, lo que indica una posible reignición. El incidente anterior se atribuyó a una falla en el sistema interno de supresión de incendios, que llevó a la destrucción del 40% de las unidades de batería. Los informes indican que las celdas de batería fueron suministradas por LG Energy Solution.
El 19 de febrero, una explosión en una propiedad residencial en el norte de Alemania se vinculó preliminarmente a un sistema de almacenamiento solar doméstico sobrecargado que utilizaba baterías de iones de litio de LG Energy Solution (9,8 kWh o 7 kWh), no de fosfato de hierro y litio (LFP). El mismo día, se produjo un incendio en un sitio de almacenamiento de energía en construcción en East Tilbury, Essex, Reino Unido, causado por una unidad de batería defectuosa.
Análisis preliminares apuntan a las baterías de níquel manganeso cobalto (NMC) de LG Energy Solution en múltiples casos recientes. Informes de medios indican que se han registrado más de 70 incidentes de fuga térmica relacionados con las baterías de almacenamiento de LG Energy Solution en los últimos años, lo que ha llevado a múltiples retiros del mercado. En contraste, las baterías LFP son conocidas por su mayor estabilidad térmica.